El aceite de camelia tiene importantes beneficios tanto para la piel como para el pelo. Pero, ¿por qué es tan conocido este aceite?
Al aceite de camelia se le conoce como ‘el secreto’ de las geishas para tener esa piel de porcelana y sin una arruga
Propiedades para la piel del aceite de camelia
El aceite de camelia contiene una alta concentración de ácidos grasos, entre los que se encuentra el ácido oleico, el aceite responsable del rejuvenecimiento celular de la piel y de aumentar su firmeza y flexibilidad. Su uso regular previene la formación de arrugas en la piel y le ayuda a mantenerse firme, sin manchas ni marcas de acné y mucho más elástica.
Además, su alto contenido en vitamina E, un antioxidante natural, te ayuda a proteger la piel de los daños externos y el envejecimiento. Todo esto unido a su potente acción hidratante son sus dos señas principales que la hacen única para el cuidado de pieles donde se empiezan a apreciar signos de la edad.
Gracias a su rápida y profunda absorción, el aceite de camelia renueva la piel, haciendo lucir más luminosa y a la vez suave.
Hidrata, nutre y repara la piel, especialmente de la cara y de las manos
Beneficios del aceite de camelia para el pelo
El aceite de camelia se está convirtiendo en un gran descubrimiento para el cuidado del pelo. Este aceite penetra en la fibra capilar y te asegura un pelo nutrido, reparado y mucho más resistente.
Hidrata, restaura y da brillo al cabello de forma natural y de manera duradera
El aceite de camelia es un elemento imprescindible si tienes el cabello quebradizo, muy fino, sin brillo o sin fuerza, ya que la camelia aporta un extra de hidratación, brillo y resistencia.
¿Cómo se aplica en el pelo?
La forma de usarlo más adecuada es después del lavado y el secado del cabello. Se aplica 4 ó 5 gotas de aceite de camelia en las palmas de las manos y se distribuyen por todo el cabello, especialmente por las puntas.